El secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios visitó la región de Diffa, en Níger, donde la violencia de Boko Haram ha obligado a un cuarto de millón de personas a abandonar sus hogares y buscar refugio a ambos lados de la frontera entre ese país y Nigeria.
Stephen O´Brien expresó consternación por los asesinatos de civiles, los saqueos de pueblos enteros y otras atrocidades cometidas por ese grupo en los países de la cuenca del lago Chad y urgió a las autoridades competentes a proteger a la población de la violencia infligida por Boko Haram.
O´Brien estuvo en varios campamentos de refugiados y desplazados, donde habló con las víctimas, algunas de las cuales han sido desarraigadas varias veces por los ataques de la agrupación extremista.
En una conferencia de prensa vía telefónica desde Niamey, el máximo coordinador humanitario de Naciones Unidas explicó que en la cuenca del Chad confluyen grandes necesidades vitales y de seguridad que precisan de la acción internacional orquestada para ser satisfechas.
Por ello, agregó, la Cumbre de la próxima semana en Turquía cobra una importancia enorme y debe cumplir con el objetivo de ayudar a aliviar el sufrimiento de millones de personas.
“Vemos con nuestros propios ojos un ejemplo muy claro de todo lo que se analizará en la Cumbre Humanitaria Mundial en Estambul el próximo lunes y martes 23 y 24 de mayo”, dijo al referirse a su visita a Níger.
El gobierno de ese país africano y las agencias de ayuda planean brindar este año asistencia alimentaria a dos millones de personas que no tienen suficiente para comer. A ellos se suman 1,5 millones más que padecen desnutrición, entre ellos 1,2 millones de niños.