Recientemente ha decidió el prohibir de su motor de búsqueda las publicidades de préstamos cuyas “condiciones” sean totalmente abusivas y lleven a los consumidores vulnerables a una espiral infinito de endeudamiento.
A partir del 13 de julio 2016, “prohibimos la publicidad de créditos fáciles y ciertos productos afines en nuestros sistemas publicitarios”, anunció el gigante gigante de la tecnología en su blog corporativo.
Los llamados “créditos fáciles”, los cuales generalmente eran a un muy corto término y con intereses sumamente altos, simplemente consisten en adelantar una suma de dinero, que el cliente se compromete a devolver el día que cobre su respectivo salario. Ahora bien, si el préstamo en cuestión es otorgado en línea, la persona debe autorizar al prestamista a que se extraiga el dinero de su cuenta bancaria el día pactado.
“No autorizaremos más la publicidad de préstamos a 60 días. En Estados Unidos, prohibimos también la publicidad de préstamos cuyo interés anual sea 36% o más”, añadió Google.
“Este cambio busca proteger a nuestros usuarios de productos financieros engañosos o nocivos, y no afectará a aquellas empresas que propongan créditos inmobiliarios, comerciales o líneas de crédito renovables (como tarjetas de crédito)”, adicionó.
Si alguien busca exactamente en Google un préstamo a descontar del salario, las empresas que lo ofrecen aparecerán entre los resultados de la consulta. Por por otro lado, si alguien busca “dinero para comprar comida”, entonces no verá ningún resultado de búsqueda de estas esas compañías.
Esta iniciativa tomada por Google fue muy bien recibida por distintas asociaciones que se dedican a la defensa de derechos civiles.
“Estas sociedades han utilizado durante mucho tiempo publicidad engañosa y marketing agresivo para que los consumidores caigan en la trampa de préstamos a tasas ofensivamente altas, en muchos casos para quienes no pueden permitírselo”, comentó Wade Henderson, quien es el presidente de la Conferencia Líder sobre Derechos Civiles y Humanos.