BANGKOK. Un tribunal de Tailandia concedió hoy la custodia de una niña subrogada, Carmen, a un matrimonio de homosexuales, el español Manuel Santos y el estadounidense Gordon Lake, tras una larga batalla legal con la madre gestante tailandesa.
“Después de 15 meses, Carmen podrá viajar a España (…) donde conocerá su habitación y al resto de su familia”, señaló Santos a Efe a la salida del tribunal de Bangkok.
Manuel, con los brazos extendidos en señal de la victoria y lágrimas en los ojos, agradeció el apoyo recibido por los tailandeses durante estos duros meses de lucha por la custodia de la pequeña.
“Estamos muy felices porque esta pesadilla terminará pronto (…) Desde el principio confiábamos en esta decisión. Amamos a Carmen y tiene que crecer con nosotros, la única familia que ha conocido”, declaró el español.
El matrimonio Santos-Lake tendrá aún que esperar unos días, hasta que el borrador de la sentencia sea ratificado y firmado por el magistrado, para solicitar el pasaporte estadounidense que permita a Carmen dejar Tailandia con destino a España, donde habitualmente reside la pareja.
Tras un proceso de subrogación que discurrió con normalidad, el 17 de enero de 2015 nació Carmen Lake, concebida con el esperma de Gordon y el óvulo de una donante anónima y gestada por la tailandesa Patidta Kusonsrang.
Los problemas surgieron cuando Patidta, quien en el hospital firmó los papeles que le otorgan la paternidad a Lake, no acudió unos diez días después del alumbramiento a la embajada de Estados Unidos en Bangkok para ultimar la documentación necesaria a fin de que la bebé pudiera salir del país.
El matrimonio Lake-Santos, quienes tienen otro hijo subrogado concebido hace más de dos años en India y que se encuentra en la actualidad en España, trataron de llegar a un acuerdo amistoso con Patidta, pero ante la falta de avances reclamaron la custodia en los tribunales.
Patidta expresó por entonces sus reservas debido a que los padres “no son normales”, en referencia a su orientación sexual, y una representante de la tailandesa llegó a insinuar que Lake y Santos eran traficantes de personas.
Ante las acusaciones, la pareja homosexual interpuso una denuncia por difamación que también se encuentra en los tribunales y proseguirá con una demanda civil para “tratar de compensar los daños causados”.
“Continuaremos con todas las causas”, aseguró este martes Santos.
Patidta, quien se encontraba en la sala en el momento de la lectura de la sentencia, tiene la oportunidad de apelar.
El Parlamento tailandés, elegido a dedo por el régimen militar, promulgó en febrero de 2015 leyes que prohíben a los extranjeros acceder a madres subrogadas, tras controvertidos incidentes con hijos subrogados de una pareja australiana y un japonés.
La nueva normativa, que entró en vigencia en julio de 2015, no afecta en principio al caso de Carmen, ya que nació antes de su aprobación.
Tras un año y 3 meses “atrapados” en Tailandia, Carmen podrá volar a su casa “pronto” a su casa, sentenció Santos.