SAN CRISTÓBAL. El Ministerio Público de este distrito judicial solicitó prisión preventiva como medida de coerción en contra del presunto narcotraficante Salomón Eusebio Rosario (Piki), quien supuestamente encabezaba una banda de sicarios, acusada de la ejecución de cuatro hombres encontrados muertos en distintos hechos en la comunidad de Yaguate, de esta provinica, en el mes de septiembre del 2013.
A la supuesta banda encabezada por Rosario se vinculó en 2013 al teniente coronel Johan Liriano, asistente del entonces presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), Rolando Rosado Mateo, pero fue descargado por el Primer Juzgado de la Instrucción de esta provincia.
La medida de coerción contra Rosario, quien fue deportado desde los Estados Unidos, será conocida en horas de la mañana de este viernes 8 de abril, durante una audiencia que será celebrada en el Juzgado de la Instrucción de San Cristóbal.
A la supuesta organización dirigida por Eusebio Rosario se le atribuyen los asesinatos de los presuntos sicarios Juan Félix Cordero Febles (Copelín) y Edgar Rafael Rijo Astacio (El Maestrico), así como de Abraham de Los Santos Rodríguez y del sargento de la Policía Luis Méndez Sepúlveda, encontrados muertos en septiembre del 2013 en la comunidad de Yaguate.
Eusebio Rosario, quien estaba declarado en rebeldía, fue deportado desde los Estados Unidos y entregado por las autoridades de la Dirección General de Migración a la Interpol en República Dominicana. Fue trasladado posteriormente a la Policía en San Cristóbal y de ahí entregado al Ministerio Público.
Una comunicación de prensa dice que tras una orden de captura internacional solicitada por la República Dominicana, emitida en atención a la orden de arresto No. 2693-2013, Eusebio fue arrestado en Colombia en el año 2014 y entregado a las autoridades de los Estados Unidos.
Informó, además, que por los casos de sicariato ocurridos en la provincia San Cristóbal fueron condenados en este mes de abril cuatro hombres, a penas desde 20 a 8 años de prisión que cumplen en diferentes recintos penitenciarios de la región sur.
Los condenados son Lorenzo Guzmán Martínez y Máximo Javier Guerrero (Tito), ambos sentenciados a ocho años de prisión; Henry Jovanny Cárdenas (El Paisa o El Colombiano), condenado a 10 años de reclusión, y Julio Alejandro Castillo, quien fue sentenciado a la pena de 20 años de prisión.