KABUL. El nuevo jefe de las fuerzas de Estados Unidos en Afganistán, el general John Nicholson, pidió hoy perdón a familiares de los 42 fallecidos el pasado octubre en un bombardeo de sus tropas contra un hospital de Médicos Sin Fronteras (MSF) en la ciudad norteña de Kunduz, donde se encuentra de visita oficial.
“Como comandante, quería venir personalmente a Kunduz y estar ante las familias y la gente de Kunduz para disculparme profundamente”, indicó el general, según un comunicado difundido por la misión de la OTAN en Afganistán, de la que recientemente se ha puesto al frente.
El bombardeo, ocurrido durante la toma talibana de la ciudad, fue calificado por el Pentágono de “error” y llevó también al presidente estadounidense, Barack Obama, a pedir disculpas a MSF.
En la reunión con Nicholson, que se produce días después de que saliese a la luz la supuesta decisión de Washington de imponer sólo sanciones administrativas a once militares involucrados en el bombardeo, también estuvieron presentes miembros de MSF y líderes de la comunidad local.
“Lloro con vosotros por vuestra pérdida y sufrimiento, y os pido perdón humilde y respetuosamente”, manifestó el jefe de las fuerzas estadounidenses y de la OTAN en el encuentro.
El ataque aéreo se produjo en el marco de la contraofensiva de las tropas afganas por recuperar Kunduz de manos de los talibanes, cuya toma temporal fue su mayor logro militar desde el fin de su régimen en 2001 tras la invasión de EEUU.
Al menos 14 trabajadores de MSF, 24 pacientes y 4 familiares que ayudaban en el centro sanitario perdieron la vida en la acción, en la que también resultaron heridas 37 personas. EFE