NUEVA DELHI (AP) — Las autoridades en la India lanzarán un programa para proteger a las personas del calor extremo en dos regiones de alto riesgo, después de que una devastadora ola de calor matara al menos a 2.500 personas en todo el país el año pasado.
India experimenta fuertes olas de calor casi todos los años. Con el cambio climático provocando temperaturas más elevadas, el país y sus 1.250 millones de habitantes soportan veranos incluso más severos que secarían bosques, destruirían cosechas, aniquilarían granjas de animales y matarían a cientos, si no miles, de personas de no estar preparados.
“India se está calentando más, y mata a gente”, dijo Anjali Jaiswal, director en la India del Consejo para la Defensa de los Recursos Naturales, con sede en Nueva York, que ayuda a líderes y funcionarios locales a adoptar el programa.
Será lanzado la próxima semana en Bhubaneshwar y tres otras ciudades en el estado oriental de Orissa, así como en el pueblo occidental de Nagpur y cuatro ciudades cercanas en donde las temperaturas el año pasado alcanzaron los 47 grados celsius (117 grados Fahrenheit), informó el miércoles el consejo.
Fue introducido en Ahmedabad en 2013, tres años después de que unas 1.200 personas murieran por causas relacionadas con el calor en la ciudad occidental. El año pasado, después de proporcionar pronósticos de clima de siete días, suministros de agua adicionales y albergues con aire acondicionado, sólo 20 personas murieron en la ciudad por el calor.
“Si quieres salvar vidas tienes que estar preparado”, dijo Jaiswal e hizo un llamado a las ciudades y regiones indias para adoptar el programa. “Cuando se trata de proteger comunidades y personas, se requiere liderazgo”.
Las ciudades que participen pasarán meses preparándose para el verano al educar a niños sobre el riesgo, equipar hospitales con paquetes de hielo y agua adicional, y capacitar a trabajadores médicos para identificar la insolación, deshidratación y golpe de calor.
Muchos de los fallecidos el año pasado eran jornaleros diurnos, albañiles y granjeros tan pobres que no podían tomarse un día libre a pesar del calor.