La Superintendencia de Industria y Transporte de Colombia impuso hoy una sanción de 451 millones de pesos (unos 142.248 dólares) a la plataforma tecnológica Uber por operar sin autorización en el país.
La entidad, encargada de vigilar y controlar la prestación del servicio público de transporte, determinó que el servicio prestado por los socios y conductores adscritos a Uber “no está autorizado” y por lo tanto la plataforma “facilita su prestación en condiciones irregulares”.
Así lo expuso en una declaración ante la prensa el superintendente de Transporte, Pablo Arteaga, quien invitó a los colombianos a utilizar “los servicios públicos habilitados”.
“La sancionada (Uber) facilitó la violación de normas en la medida en que, tal y como quedó demostrado, con esa herramienta tecnológica se presta servicio sin autorización y sin los requisitos solicitados por la plataforma de transporte”, afirmó Arteaga.
Esta sanción ratifica una resolución expedida el año pasado por la Superintendencia de Transporte, que investigaba a la plataforma desde noviembre de 2014.
Uber presentó un recurso ante dicha decisión, que se confirmó en segunda instancia con la multa presentada hoy, frente a la cual no proceden otros recursos.
Además de la sanción, la Superintendencia de Transporte impuso una denuncia ante la Superintendencia de Industria y Comercio para que se investigue a Uber por competencia desleal, agregó Arteaga.
Uber, que llegó a Colombia a finales de 2013 y cuenta con al menos 20.000 socios conductores, ha tenido gran acogida en ciudades como Bogotá, donde numerosos usuarios se quejan de la calidad del servicio prestado por los taxis tradicionales.
Agencia EFE