Pretoria, Sudafrica .- Una vez más el mayor foro opositor de Sudáfrica, el partido Alianza Democrática (DA) perdió su moción de confianza frente al presidente Jacob Zuma, tras el fiasco que se llevó hoy en el Parlamento.
El resultado no sorprende. Ya algunos observadores habían anticipado que el DA -fuerza política que históricamente representó a la minoría blanca- perdería en esta nueva maniobra para sacarlo de Union Buildings, similar a la de marzo de 2015, que también fracasó.
La oposición ha tratado, desesperadamente, de minar el apoyo popular hacia el gobierno del Congreso Nacional Africano (ANC) y al presidente Zuma.
En esta oportunidad los números en el Legislativo arrojaron 225 votos en contra de la moción (el año pasado fueron 221); 99 a favor y hubo 22 abstenciones. El ANC cuenta con una amplia mayoría parlamentaria.
El argumento empleado ahora se basó en una supuesta incapacidad del mandatario para conducir el país, a partir de los movimientos que hizo en su gabinete a finales del año pasado, cuando cambió a dos ministros de Finanzas en menos de una semana.
Además, responsabilizan al jefe de Estado de llevar a la nación hacia la actual coyuntura económica, caracterizada por la desaceleración.
Incluso, revivieron ante los tribunales una pelea legal en la cual se imputa al gobernante de supuestos cargos de corrupción.
Parte de la línea de ataque -dicen los observadores- es recurrir a vías que ensombrezcan y denigren la imagen de Zuma.
Los mismos analistas coinciden en que, pese a todos los intentos de la oposición, el ANC debe continuar en el poder más allá de 2019.
Quizás el secreto radica en que el pueblo de Sudáfrica tiene conciencia de los obstáculos que enfrenta el país en una serie de áreas, pero “sigue confiando en que el ANC es el único partido” que puede cumplir con sus esperanzas y aspiraciones, por su sólida historia de la lucha, como subrayó un comunicado.
Aunque las estadísticas fueron ligeramente inferiores a 2009, hace menos de 24 meses la población votante expresó -con abrumadora mayoría- su confianza en el ANC y en Zuma.
En los comicios de mayo de 2014 de los 29 partidos políticos que figuraban en las boletas de los 18 millones 600 mil electores registrados, el ANC logró el respaldo de 11 millones 400 mil para el 62,15 por ciento de los votos.
Con ese triunfo, el histórico partido de Nelson Mandela obtuvo su quinta victoria consecutiva desde que llegó al poder (en alianza con el Congreso de los Sindicatos de Sudáfrica y el Partido Comunista Sudafricano en las primeras elecciones libres celebradas en 1994.
Esto consolidó la mayoría del ANC en el Parlamento y aseguró así el segundo mandato para Zuma, hasta dentro de tres años.
Fuente: Prensa Latina