MELBOURNE — Dominante ante la N°4 del mundo y sin ceder sets en todo el torneo, Serena Williams está en su 26ª final de Grand Slam, séptima en el Abierto de Australia. A un triunfo del récord de Steffi Graf. Y todo después de cuatro meses fuera de las canchas…
“Es una gran noticia estar en la final después de tanto tiempo sin competir. Obviamente no esperaba perder en primera ronda, pero tampoco es que esperaba estar aquí en este momento. Literalmente me tomo todo un punto a la vez”, enmarcó Serena tras el 6-0 y 6-4 sobre Agnieszka Radwanska.
“Contra una jugadora como Aga, tienes que estar lista para darlo todo o lista para irte a casa. Por eso era tan importante empezar bien concentrada, que es algo que en muchos partidos me termina costando -explicó-. Esta vez tuve un gran primer set. Pegué todos los tiros exactamente como debía, prácticamente sin una sola falla”.