SANTIAGO. Estudiantes del nivel básico del sector Santa Lucía, encabezados por el pastor evangélico Pablo Ureña, realizaron una caminata por varias calles para denunciar el abandono en que se encuentran ese barrio y otros aledaños, el deterioro de las vías, la falta de iluminación y la precariedad del sistema sanitario.
“Aquí la gente se está enfermando, nuestros niños tienen más problemas respiratorios y para llegar a los centros educativos tienen que hacer un crucigrama por el mal estado de las calles, las cuales son todas de tierra”, subrayó Ureña.
Indicó que hace más de 15 años que los barrios Santa Lucía, Las Colinas, Villa Rosa Segundo, Los Solares y La Piña no reciben la ayuda de ninguna autoridad.
“Nuestras madres también se están enfermando, por lo que llamamos a Obras Públicas, Salud Pública y Medio Ambiente a que vengan a auxiliarnos”, puntualizó Aury Gómez.
Denunciaron que hace varios años el Gobierno Central, en coordinación con la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (CORAASAN), construyó una planta cloacal, pero que luego fue abandonada.
Pablo Ureña manifestó que el problema se agrava cuando ocurren precipitaciones, ya que debido a la gran cantidad de lodo, los estudiantes no asisten a los centros de enseñanza.
Dijo que más de mil estudiantes son afectados por el mal estado de las calles.
Hace varios años, el Ayuntamiento local construyó varios contenes y calzadas, pero no prosiguió con el programa, por lo que las calles de estos sectores se encuentran en un progresivo estado de deterioro.