REDACCIÓN. Aunque la población estadounidense tiene mejores niveles de empleos que en años recientes, un estudio de Bankrate.com, señala que el 62% de la población tendría que pedir dinero prestado en caso de enfrentarse a una emergencia.
De una población cuestionada de mil personas, el 23% dijo que tendría que cortar sus gastos, el 15% tendría que buscarlo dentro de amigos y familiares y el 15% tendría que tomar prestado a una entidad bancaria.
De acuerdo con la investigación, el hecho de que el 63% de las personas que trabajan no puedan hacerle frente a una situación de emergencia es preocupante porque a lo largo de un año el 40% de la población sufre un evento económico no planificado.
De acuerdo con la Reserva Federal de los Estados, a partir de 2014 los ahorros entre los estadounidenses bajaron a mínimos debido a la recesión económica.
Un censo de la Reserva Federal indicó que durante la crisis el 57% de los ahorrantes usó todos sus ahorros o buena parte para poder sortear la crisis.