El día de Nochebuena se convirtió en noche de tragedia para la familia de dos mujeres que fueron asesinadas a puñaladas y a tiros por sus parejas, en el sector Cristo Rey de la capital y en Higüey. En un caso el agresor se suicido, en el otro fue apresado.
Las víctimas son Elmyl Abigail Rodríguez Almonte, de 26 años; Ariel Yacil Rodríguez, de 33 (suicida), y Leidy Yohanni Tavárez Contreras, de 28. El detenido es Miguel Frías Brito, de 23.
En la calle Respaldo 35 abajo, en La Caña del sector de Cristo Rey, Yacil Rodríguez mató a puñaladas y en presencia de sus hijos de 5 y 7 años a Rodríguez Almonte, de quien tenía un mes y diez días separado.
Dominga Gutierrez, tía de Elmyl, contó que la pareja tenía ocho años de casada, pero se separaron porque él era muy agresivo, consumía drogas y la golpeaba con frecuencia.
Dijo que vivían en Fantino, Cotuí, pero al separarse, su sobrina fue donde ella en Baváro, pero Ariel la llamaba y le decía que si no volvían se iba a suicidar, e incluso le mandaba fotos por WhatsApp cortándose las venas o con un lazo en el cuello.
Explicó que Ariel también mandaba las imágenes a su madre, quien reside en Boston, y esta convenció a Elmyl para que regresaran.
Contó que el día 23, él le dijo que fuera a buscar dos mil pesos para que le comprara la ropa a los niños, ella no aceptó, pero la mamá de él la llamó diciéndole que fuera que le había mandado el dinero y le envió fotos por WhatsApp del envío.
“Cuando ella vino, él le dijo: yo no te voy a joder más, voy a comprar la ropa de los muchachos y tu te vas, yo no tengo que ver más con ustedes”, expresó.
Manifestó que cuando su sobrina llegó a la capital apagó el celular porque él la tenía presionada, y no supo más de ella.
Señaló que a las 6:00 de la tarde, marcó el celular de Ariel, un muchacho contestó y le dijo que había ocurrido una tragedia, que el dueño de ese teléfono mató a su mujer y se ahorcó.
Le dijeron que Ariel mató a su sobrina en presencia de los niños, quienes pidieron ayuda, y cuando los vecinos entraron impidieron que él se ahorcara, pero el corrió y se ahorcó en una casa en construcción, del mismo sector.
Elmyl Abigail tenía otro hijo mayor fuera de este matrimonio.
El homicida, suicida. En un aparente estado de rabia, Ariel asesinó a Elmyl y, luego de intentar quitarse la vida en tres viviendas diferentes, se ahorcó en la casa de una vecina, donde entró sin ser visto.
La madre de Ariel, Lala Rodríguez, quien llegó antier al país desde Bostón y calmada contaba el desgarrador drama, afirma que su hijo “estaba poseído por el diablo” y dispuesto a quietarse la vida, ya que tenía un tiempo enviándole mensajes por celular, con cortaduras en el brazo, hechas con navajas y los pies atados con sogas, como el preludio de su acción.
Hace 14 días, dijo, Ariel también acudió a casa de una amiga de ella, donde intentó suicidarse con dos cuchillos, los cuales les fueron quitados.
Más estremecedor es todavía lo que cuenta el niño de cinco años: “Mi padre le sacó sangre a mi madre de ahí, de la barriga”. El pequeño estuvo en la habitación junto a su hermano de siete años y al ver a sus padres pelearse en la cama y Ariel darle las estocadas a su madre, salieron por ayuda. Gritaban que su padre cortó a su madre.
Su madre y su padre murieron, dejándolos huérfanos y aún jugaban, correteaban y reían en el patio de la casa donde ocurrió la tragedia, a pocos horas del suceso que quedará en sus mentes y que deja huérfanos a sus otros tres hermanos de padre, de siete, nueve y 11 años.
Expresó que su hijo se veía mal desde que su mujer rompió la relación, porque descubrió que recibió mensajes de una novia que tuvo a los 14 años. “El no era de nada, pero si lo buscaban, lo encontraban. Me llamó el domingo y me comentó que le iba a dar el gusto a su mujer, porque ella le dijo que si quería se matara”.
Yumairy Rodríguez, prima de Ariel, dijo que la pareja estuvo bien en horas de la mañana. Que les compró desayuno a los hijos y le dio a ella RD$1,200 que tenía. “Ellos salieron. Tomaron unas cervezas en la casa, al volver, y estando solos, sucedió todo”, narró.
Fuente: Periódico Hoy