SANTO DOMINGO. Las mujeres que enfrentan violencia por su condición de género tienen tres veces más riesgo de contraer VIH que aquellas que no han sido víctimas de violencia, según el informe “Estrategia Nacional para evaluar el vínculo entre la violencia contra la Mujer, Niñez y el VIH 2015-2020”.
Mientras, el Informe de la Epidemia del VIH elaborado por ONUSIDA revela que el mundo ha detenido y revertido la propagación del VIH, investigación que señala que en la región del Caribe las nuevas infecciones por el virus y las muertes se han reducido en un 50% desde el año 2000, como consecuencia del aumento del acceso a medicamentos antirretrovirales en un 84%, a partir de 2010.
Bethania Betances, directora del Programa de las Naciones Unidas para el VIH/SIDA (ONUSIDA) en el país, sostiene que estas cifras reflejan que el mundo ha superado las metas establecidas en los Objetivos de Desarrollo del Milenio y que en la actualidad, “nos encaminamos a poner fin a la epidemia del sida como un problema de salud pública a través de la adopción de una nueva estrategia llamada Respuesta Rápida o Fast Track”.
“Sin embargo, estos cálculos y estrategia basados en datos no podrían ser posibles si no se abordan acciones sólidas y acertadas para detener la violencia contra mujeres y niñas como una parte integral de la respuesta al VIH”, dijo Betances.
Dijo que las evidencias demuestran que las mujeres que enfrentan violencia por su condición de género tienen tres veces más riesgo de contraer VIH que aquellas que no han sido víctimas de violencia en cualesquiera de sus formas, ya sea sexual, psicológica o física.
“Y es que el vínculo entre violencia contra mujeres y niñas, y el VIH y sida se da de forma directa a través del sexo forzado o relaciones sexuales no deseadas, con la transmisión facilitada por los genitales o trauma anal, por aquí el nivel de riesgo de contagio por VIH es de 1 a 2%”, añadió.