SANTO DOMINGO. Aunque el Ayuntamiento del Distrito Nacional acondicionó el mercadito del barrio Simón Bolívar, todavía persisten algunos problemas como la utilización de ese espacio durante las noches para cometer fechorías por la falta de iluminación.
Lo que había sido un desorden durante más de 35 años, donde se vendían los productos en condiciones antihigiénicas es ahora un espacio organizado, excepto otros tramos de la calle Jesús de Galíndez donde otros comerciantes venden productos en las aceras y en plena calle.
El mercado, comprendido entre las calles San Martín de Porres y la Albert Thomas, lo integran unos 40 vendedores, a los que el cabildo les construyó unas casetas donde venden sus productos.
Jesús Puello, directivo de la Asociación de Comerciantes del Mercadito del Simón Bolívar, explicó que por las noches no se puede pasar por el área del mercado, porque se es inmediatamente atracado, a pesar d que a sólo una esquina está el Destacamento de la Policía del sector.
Explicó que el cabildo instaló postes con lámpara, pero no funcionan por lo que el lugar está totalmente a oscuras. Aclaró que los comerciantes no son víctimas de los delincuentes en el aspecto del robo de mercancías, porque cada uno la guarda con seguridad.
“Hasta ahora, la obra ha sido muy importante y esperamos que las autoridades pasen por aquí como acordaron para que resuelvan el problema de la falta de luz”, dijo.
“El síndico ha hecho muchas cosas buenas por aquí, esperamos que haga más casetas”, afirmó Tito Terrero, uno de los vendedores, pero de los que colocan sus productos en la calle.
Ramón Emilio Vásquez reclamó que hay que iluminar el lugar, y poner aunque sean dos policías de servicio durante las noches para evitar que se cometan atracos.
Para Caonabo López, el problema no es que construyan más casetas, porque tiene sus productor en un triciclo, sino que no está vendiendo porque no hay dinero.
Explica que muchas de sus frutas se pierden, porque las ventas están muy bajas pues la gente no tiene dinero para comprar.