NUEVA YORK. Jeremy Sánchez, a quien los investigadores señalan como un pandillero dominicano, fue condenado a una pena de 25 años a cadena perpetua en una prisión estatal, después de ser declarado culpable por el asesinato de Kenneth Archbold el 15 de julio de 2012, en la esquina de las calles 134 Oeste y la avenida Lenox, en Harlem.
Sánchez se declaró “no culpable” en octubre de 2012 y enfrentó el juicio en el que el jurado decidió el veredicto que lo envía por el resto de sus días a la cárcel.
La Oficina del Fiscal del Distrito Cyrus R. Vance Junior, aplaudió la sentencia en un comunicado, diciendo que “Sánchez, de 19 años de edad, disparó en una esquina de Harlem contra Archbold, a quien dejó morir desangrado, por lo que fue declarado culpable de asesinato en segundo grado y posesión ilegal de un arma para cometer un crimen”.
Agrega que, “la violencia armada afecta irrevocablemente la vida de las víctimas y sus seres queridos y, en este caso, la trágica muerte de un joven tuvo lugar apenas unas semanas antes del nacimiento de su hija, que nunca tendrá la oportunidad de conocer a su padre”.
El comunicado de la fiscalía añade que “como se ha demostrado en el juicio, Kenneth Archbold y un amigo estaban montando bicicletas en la avenida Lenox cuando se encontraron con Sánchez en la esquina de la calle 134 Oeste. Después de correr detrás del amigo de la víctima, el acusado sacó una pistola y le disparó tres veces en el pecho. Sánchez huyó, dejando a la víctima inconsciente y sangrando en la calle, aproximadamente a una cuadra del hospital de Harlem”.
La víctima, según el comunicado, murió poco después.
La sentencia significa que cuando Sánchez cumpla los 25 años en la prisión, podrá pedir por primera vez la libertad condicional, pero la junta podrá negársela de por vida.