Santo Domingo.-Haití reivindicó ayer su derecho a regular la entrada a ese país de productos dominicanos, y a establecer mejores controles para evitar las millonarias pérdidas que le produce un sistema deficiente de inspección en su frontera terrestre.
“Tenemos que proteger al país, a nuestros inversionistas locales y a nuestras fronteras que acusan una pérdida de alrededor de un millón de dólares mensuales debido a nuestro sistema de supervisión inadecuada”, dijo ayer a la prensa de su país el canciller haitiano Lener Renauld.
Haití cerrará sus fronteras terrestres a 23 productos procedentes de República Dominicana para mejorar el control de calidad de importación de bienes dominicanos, aunque permitirá su acceso a través de puertos marítimos y aéreos.
Llamada a consulta
Nada más conocerse la medida, el gobierno dominicano llamó a consulta a su embajador en Haití, Rubén Silié Valdez, y acusó a ese país de violar compromisos binacionales como un acuerdo suscrito el año pasado, que establece que “las partes notificarán cualquier norma e instrumento legal relativo al comercio antes de su puesta en práctica”.
“Esta decisión del gobierno de Haití es una decisión de control”, dijo ayer Renauld, para insistir en que la decisión de su gobierno busca garantizar la seguridad de la población.
El funcionario agregó que la “irritación” de República Dominicana será la única consecuencia diplomática de la disposición.