El delantero brasileño del FC Barcelona, Neymar, podría tener que declarar como testigo junto a otras siete personas en el juicio por un posible fraude fiscal en su fichaje por el club catalán, afirmó este viernes la radio española Cadena Ser.
Madrid/AFP 3 de Abril 2015
Según fuentes judiciales citadas por este medio, “la fiscalía propondrá su declaración como prueba para el procedimiento penal por el que se acusa de fraude fiscal al presidente del club, Josep María Bartomeu, al propio Barsa y al expresidente Rosell, a quien además se le imputa administración desleal”.
Según estas mismas fuentes, la Audiencia Nacional de Madrid aceptará esta petición. La comparecencia del jugador ante los jueces se justifica por el hecho de que Neymar firmó nueve de los trece contratos que están bajo investigación, prosiguió la Cadena Ser.
El actual presidente del Barsa, Bartomeu, y su predecesor Rosell presuntamente ocultaron el coste real del fichaje del astro brasileño de 23 años, quien firmó por el club catalán en junio de 2013.
El juicio tendría lugar este otoño (boreal), según informaciones de la Cadena Ser, y no duraría más de una semana.
La fiscalía, que en España presenta la petición de penas antes del comienzo del juicio, pidió el pasado 23 de marzo para Josep María Bartomeu una pena de dos años y tres meses de cárcel y para su predecesor Sandro Rosell, siete años y medio. También pidió que el club pague una multa de 22,2 millones de euros (24,1 millones de dólares).
El magistrado encargado de la investigación considera que el coste real del traspaso fue de 83,3 millones de euros como mínimo (90 millones de dólares). Con el objetivo de ocultar esta cantidad total, el pago se fraccionó en numerosos contratos, según la justicia.
Oficialmente, el Barcelona dijo que el fichaje le costó 57 millones de euros.
El delantero brasileño firmó con el Barcelona por cinco temporadas en mayo de 2013, a pesar de que el Barsa había previsto incorporarlo inicialmente en 2014 cuando el jugador quedara libre para lo cual se había firmado un acuerdo en 2011.
Fuente: Prensa Libre