DICEN PUNTO COM
Por Nolasco Rivas Fermín.
No todo a lo que somos contrario o decimos que se ve feo es ilegal y tampoco no todo lo bonito o lo que nos gusta es legal.
En los últimos días, en nuestro país, ya sea por…, lo que sea, prácticamente se está jugando a invertir la realidad o más bien la legalidad, en ese sentido, dependiendo de los actores, a lo bonito se le dice ser legal aunque no lo sea y a lo que no se ve muy bonito o a un grupo no le guste, entonces se le dice que es ilegal aunque no lo sea.
Ilustraremos lo antes expresado con un ejemplo, se estila en nuestro país que para determinado trabajo público se otorgue o se cobre un por ciento para la asignación de una obra o un “puesto”, algo que es totalmente ilegal, pero como a muchos le cae bien, entonces se dice que es algo cotidiano y que no debería ser ilegal, por ende lo aceptan como algo legal. Por otra parte y de manera alarmante, en los últimos días se está considerando ilegal el cumplimiento de las normas procesales en los casos judiciales.
¿A qué me refiero? Principios tan elementales como la presunción de inocencia o el cumplimiento de los plazos, está desapareciendo en nuestro país, están pasando de ser un principio universal, constitucional y legal a algo totalmente ilegal, solo es necesario de que alguien acuse a otro de haber cometido un hecho y ya debe de ser declarado culpable y condenado a pena máxima.
Es altamente preocupante esta situación pues los principios básicos de procedimientos no deben ser violentados por feo que sea el caso.
Las leyes deben ser iguales para todos, tanto en su contenido como en su ejecución e interpretación, aplicárseles a todos de manera similar.
Los juzgadores deben de velar, no por encontrar un culpable, no de encontrar un inocente o de dar una decisión que se vea bonita y guste o fea y no guste, solo deben de determinar si la Ley ha sido quebrantada o no, con la misma balanza juzgar y emitir decisión.
No queremos un sistema bueno para unos y malo para otros, no queremos un sistema que juzgue antes del juicio, no queremos un sistema con miedo para decidir, pero mucho menos queremos un sistema para “el que dirán”.
Queremos un sistema coherente y que simplemente cumpla y haga cumplir la LEY, CON IGUALDAD PARA TODOS, pues después de todo ya tenemos una sociedad que se encarga de discriminar.
